Mirada crítica a la educación

27 de Septiembre de 2024

Jorge Muñoz
Jorge Muñoz

Mirada crítica a la educación

Columna Jorge Muñoz

Uno de los mayores retos que se encuentran en la agenda del próximo gobierno es el educativo, mismo que tiene dos aristas fundamentales: por un lado, nuestro país ha manifestado severos desafíos para garantizar el acceso a la enseñanza, ya que, según datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), 6.4 millones de niñas, niños y jóvenes de entre tres y dieciocho años no asisten a la escuela, lo que equivale al 18% de la población en edad escolar.

Por otra parte, México presenta una importante problemática en cuanto a la calidad de los conocimientos y habilidades adquiridos en clase, debido en parte al lento proceso de adaptación del sistema educativo a las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación. Cada uno de estos temas constituye un factor que requiere atención inmediata del gobierno, toda vez que resolver la cuestión educativa se volverá más difícil entre más tiempo pase, pues no sólo aumentará la cantidad de personas que sufran de una deficiencia en su formación, sino que dichas personas, a su vez, obtendrán salarios con menor remuneración y, consecuentemente, pagarán menos impuestos, lo que provocará una disminución en el presupuesto disponible para atender este y otros problemas.

Adicionalmente, el gobierno siguiente se encontrará con el reto de lograr los avances en los dos aspectos arriba descritos, con las condicionantes que impone el contexto político actual. En México, el tema educativo siempre ha representado una fuente de polémica y debate que debe desahogarse en las más altas esferas de la negociación política. Ejemplo de lo anterior han sido temas como el libro de texto gratuito y obligatorio que durante el sexenio de Adolfo López Mateos representó una coyuntura cuya efervescencia desembocó en el desacuerdo de grupos empresariales que consideraban que la obligatoriedad de los libros de texto oficiales era una medida comunista, contraria a los intereses de las y los mexicanos.

Por último, cabe añadir que durante el actual sexenio se realizaron cambios interesantes en la política educativa cuyos resultados no han podido ser analizados, ya que las modificaciones hechas a los planes de estudio y a los libros de texto precisamente, de nuevo generaron debate y se implementaron muy recientemente. Cabe señalar que quienes criticaron dichos cambios en los libros destinados a los alumnos de primaria lo hicieron desde una postura relacionada con la conservación de contenidos como matemáticas y ortografía; sin embargo, es muy pronto para analizar los efectos que estos cambios han tenido en el alumnado.

Entonces, sin acceso garantizado, calidad suficiente o información sobre las consecuencias de los cambios implementados por el actual gobierno, quien se haga cargo de la provisión de servicios educativos a partir de octubre deberá ser consciente de la magnitud del reto a que se enfrentará y de la enorme responsabilidad que recaerá sobre sus manos. Algo que se encuentra fuera de toda discusión es que un país con mejor educación se encuentra más próximo al ideal al que pretenda acercarse cualquier gobierno responsable, sea cual fuere su enfoque político.