En Acapulco, Guerrero, la inseguridad y la falta de conectividad aérea hacia el extranjero alejó a cadenas hoteleras internacionales, quienes desde hace cinco años no construyen un hotel, incluso algunas decidieron salir.
De acuerdo con El Financiero el último hotel de marca internacional que se edificó en el puerto fue el Banyan Tree Cabo Marqués, inaugurado en 2010. La construcción de hoteles se ha centrado en pequeños inmuebles, lo que reduce la infraestructura y por ende, la oferta para el turismo.
Comparado con otros destinos similares en el país, en 2014 el número de cuartos disponibles en Acapulco creció 0.3% con respecto al año anterior; mientras que Cancún tuvo un incremento de 1.5%, Nuevo Vallarta 6.9% y La Paz 11.7%, en el mismo periodo.
Las firmas que han salido del puerto son Sheraton y Hyatt. La Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco aseguran que hace falta que lleguen más marcas internacionales para “poder subir el tipo de categoría de turismo” que reciben.
Las llegadas de turistas extranjeros a hoteles de Acapulco durante 2014 reportaron su peor cifra desde 2007. Mientras que los arribos de turistas nacionales se ubicaron en 4 millones 481 mil, la cifra más baja desde 2011.
Sobre la conectividad aérea, también hay un retroceso; de las 11 aerolíneas extranjeras que volaban hace siete años a Acapulco, sólo United Airlines mantiene su vuelo desde Houston.
